En el ciclo actual de ICILS 2023, el foco de atención sobre el uso de las TIC incluyó el lugar (en el centro educativo o fuera de este) y el alcance del aprendizaje del alumnado sobre tareas relacionadas con las TIC. Se les pidió a los estudiantes que indicaran en qué medida habían aprendido a realizar ciertas tareas específicas relacionadas con las TIC en su centro educativo.
En esta parte de la sección nos centramos en las respuestas de los estudiantes sobre los conocimientos adquiridos en el centro educativo. Estos respondieron seleccionando una de las siguientes opciones de respuesta para cada tarea (“en gran medida”, “en una medida moderada”, “en poca medida” y “nada”). Las tareas TIC presentadas a los estudiantes fueron:
En la Figura 3.1.a. se presenta el porcentaje de estudiantes que respondió haber aprendido en una moderada o gran medida las tareas TIC mencionadas anteriormente en su centro educativo, para los países participantes en el estudio ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE. En la figura los países se encuentran ordenados por orden decreciente según su rendimiento en CD, indicado entre paréntesis.
Figura 3.1.a. Porcentaje de estudiantes que responden aprender en una moderada o gran medida al realizar las siguientes tareas TIC en su centro educativo para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE
Pulse para ampliarLas cuatro primeras tareas tienen un enfoque más general de las TIC, mientras que las dos últimas se refieren a la programación informática. Los resultados muestran que, en todos los países, según la perspectiva de los estudiantes, la programación recibió algo menos de atención que las actividades generales de TIC. Menos de la mitad del alumnado afirmó haber aprendido, al menos moderadamente, a crear un programa en el centro, frente a más de la mitad de los estudiantes que respondió lo mismo para las demás tareas TIC.
Según los resultados, más de dos tercios del alumnado afirmó haber aprendido a organizar archivos y editar documentos o presentaciones en el centro educativo, al menos en una medida moderada. En promedio, más de la mitad de los estudiantes respondió haber aprendido a calcular con hojas de cálculo en el centro educativo. Los porcentajes de respuesta del alumnado español son similares al Promedio UE en cuanto a las tres primeras tareas generales TIC, pero son ligeramente inferiores en calcular con hojas de cálculo y en las dos tareas específicas de programación.
La producción de programas informáticos ha cambiado desde que existen los programas de codificación visual o basada en bloques. Los entornos de codificación basados en bloques son útiles para enseñar competencias de pensamiento computacional, especialmente a los principiantes. Así lo confirman los resultados obtenidos en ICILS 2023. Escribir programas utilizando un editor de programación visual se adquiere en la escuela con más frecuencia en 25 de los 31 países que cumplían los requisitos de participación y presentamos en el informe. Corea, el país con el mayor rendimiento medio en competencia digital con 540 puntos, tiene la mayor proporción de estudiantes que afirmaron aprender a programar en el centro educativo con editores visuales o de bloques al menos moderadamente, con un 70 % (Ver Figura 3.1.a.).
La menor variación dentro de un país entre las distintas tareas se observa en Azerbaiyán, Omán y Serbia, donde un porcentaje similar de estudiantes de todas las tareas declaró haberlas aprendido en la escuela en un grado al menos moderado. Por el contrario, observamos una variación considerable entre tareas en Austria, Bélgica, Noruega y, especialmente, Dinamarca. En estos países, los conocimientos adquiridos con menos frecuencia en la escuela según los informes de los estudiantes están relacionados con la escritura de un programa informático. En España, casi las tres cuartas partes de los estudiantes declaró aprender al menos en una moderada medida a editar el diseño y el formato de documentos o presentaciones de diapositivas en su centro educativo. Por el contrario, poco más de la cuarta parte declaró haber aprendido programas informáticos utilizando un lenguaje de programación basado en texto.
En la Figura 3.1.b. se presenta el porcentaje de estudiantes que respondió haber aprendido en una moderada o gran medida estas tareas relacionadas con las TIC en su centro educativo, desglosados, en esta ocasión por comunidades y ciudades autónomas participantes. La figura también incluye los valores correspondientes a España y el promedio de la UE.
Más de dos tercios de los estudiantes han aprendido a editar y formatear documentos, y más de la mitad a organizar archivos, editar archivos multimedia y calcular con hojas de cálculo, al menos de una manera moderada, en su centro educativo. Sin embargo, menos de la mitad de los estudiantes afirmó haber aprendido a programar en cualquier formato en los centros educativos.
La menor variación dentro de una comunidad o ciudad autónoma entre las distintas tareas se observa en Ceuta y en Melilla. Por el contrario, observamos una variación más alta entre tareas en Cataluña, Principado de Asturias y Canarias.
En general, se observa que cuanto mayor es la proporción de estudiantes que afirman aprender a realizar las distintas tareas TIC en el centro educativo, dentro de una ciudad o comunidad autónoma, mayor es el rendimiento en CD.
Figura 3.1.b. Porcentaje de estudiantes que responden aprender, en una moderada o gran medida, a realizar las siguientes tareas TIC en su centro educativo para las comunidades y ciudades autónomas participantes
Pulse para ampliar3.2.1. Aprendizaje sobre internet en el centro educativo y fuera de este
SubirEsta sección aborda el grado en que los estudiantes aprenden, tanto dentro como fuera de su centro educativo, sobre tareas relacionadas con internet, tales como evaluar críticamente la información y las fuentes en línea, comprender los derechos de propiedad intelectual, referenciar adecuadamente el contenido digital y tomar medidas para proteger la información personal y los dispositivos contra amenazas cibernéticas (incluida la importancia de salvaguardar los datos personales).
Internet se ha convertido en un recurso importante tanto para el lugar de trabajo como para la vida privada de las personas, incluyendo la de los jóvenes. Muchos adolescentes han crecido con este recurso y ya no pueden imaginar un mundo sin él. Sin embargo, internet presenta algunos riesgos, como el ciberacoso, las estafas en línea, el robo de identidad y la exposición a contenido inapropiado. El concepto de la competencia digital de ICILS incluye contenido relacionado con la navegación segura y responsable por internet (Fraillon et al., 2023 ). Los estudiantes necesitan entender la importancia de proteger su información personal, aprender sobre configuraciones de privacidad, contraseñas seguras y los riesgos de compartir demasiada información sobre sí mismos. Esto puede ayudarles a mantener su privacidad y seguridad en línea.
Además, la percepción de disponibilidad instantánea de contenidos puede inducir a reacciones inmediatas y a desafiar a los usuarios que carecen de las habilidades para evaluar adecuadamente la información. Los estudiantes deben ser conscientes de sus derechos y responsabilidades en el mundo digital, incluyendo el respeto a la propiedad intelectual de otros, la práctica de la etiqueta en línea y la contribución positiva a las comunidades en línea. El pensamiento crítico como parte de la competencia digital debe ser un elemento importante de la educación. Los estudiantes tienen que aprender a distinguir entre fuentes confiables y desinformación, lo cual es particularmente importante en tiempos de noticias falsas y propaganda en línea (McGrew, 2020 ).
A medida que los estudiantes se preparan para sus futuras carreras, entender cómo usar las TIC de manera responsable se vuelve cada vez más importante. Muchos empleadores esperan que su personal tenga fuertes habilidades digitales y que use la tecnología de manera ética y segura en el lugar de trabajo. En general, incorporar la educación sobre el uso seguro y responsable de las TIC en el currículo podría equipar a los estudiantes con habilidades y conocimientos esenciales para navegar el mundo digital de manera efectiva y responsable (Falloon, 2020; Janssen et al., 2013 ). Sin embargo, no todos los estudiantes reciben esta enseñanza en la escuela de la misma forma.
En un intento por investigar las oportunidades de los estudiantes de 2.º de ESO para aprender a navegar por internet de manera segura, se les preguntó en qué medida han aprendido a realizar las siguientes tareas:
Se pidió a los estudiantes que informaran en qué medida habían aprendido a realizar cada una de las tareas dentro y fuera del centro. Los estudiantes respondieron seleccionando una de las siguientes cuatro opciones de respuesta para cada tarea (“en gran medida”, “en moderada medida”, “en pequeña medida” y “nada en absoluto”).
Para investigar en qué medida varía este aprendizaje entre países, se han construido dos escalas o índices basados en las respuestas de los estudiantes a las seis tareas mencionadas anteriormente, que muestran la extensión del aprendizaje responsable en internet, uno para el aprendizaje de tareas relacionadas con internet en la escuela y otro para el aprendizaje de tareas relacionadas con internet fuera de la escuela. Las puntuaciones más altas en estas escalas indican una mayor medida de aprendizaje de internet. Las escalas se establecieron con una puntuación media de 50 y una desviación estándar de 10 para los países que cumplen con los requisitos de participación de ICILS.
3.2.1.1. En el centro educativo
SubirEn la Figura 3.2.a. se observa el valor del índice, entre paréntesis, que declaran los estudiantes sobre la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet en el centro educativo, su intervalo de confianza con un nivel de confianza del 95 % y su correlación lineal con la puntuación media obtenida en el rendimiento en competencia digital para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE. Los países en color ocre no presentan diferencias estadísticamente significativas con el valor del índice en España. Los puntajes promedio en Suecia, Letonia, Noruega, Taiwán y Portugal superan el Promedio UE en más de un tercio de una desviación estándar. En contraste, Francia, Bosnia-Herzegovina, Eslovenia y Azerbaiyán tuvieron puntajes promedio más de un tercio de una desviación estándar por debajo del promedio de ICILS 2023. Esto podría indicar que el grado en que los países han implementado con éxito la enseñanza de estos temas en la escuela varía moderadamente. El valor del índice en España (49,1), aunque por debajo, está muy próximo al Promedio UE (49,7) con menos de un punto de diferencia.
La tabla también presenta los coeficientes de correlación del índice con el rendimiento en CD. Estos, aunque a menudo son estadísticamente significativos, están cercanos a cero. Las correlaciones son positivas en algunos países, mientras que negativas en otros, lo que sugiere que no hay un patrón consistente sobre cómo las oportunidades de aprender específicamente esos temas sobre internet en el centro educativo se relacionan con el rendimiento de los estudiantes en CD.
Figura 3.2.a. Valor del índice para la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet en el centro educativo por el alumnado, su intervalo de confianza con un nivel del 95 % y su correlación con el rendimiento en CD, para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE
Pulse para ampliarEn la Figura 3.2.b. se observa el valor del índice, entre paréntesis, que declaran los estudiantes sobre la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet en el centro educativo, su intervalo de confianza al nivel del 95 % y su correlación lineal con la puntuación media obtenida en el rendimiento en CD para las comunidades y ciudades autónomas participantes. Cataluña (50,9) y Canarias (50,0) son las únicas que obtienen un valor del índice superior al Promedio UE (49,7). Por otro lado, es en Ceuta(44,4) y Melilla (46,7) donde los estudiantes consideraron estar trabajando el uso responsable de internet en menor medida en su centro educativo que en el resto de regiones participantes con muestra ampliada.
En cuanto a la correlación del índice con el rendimiento en CD, se obtienen también unos valores próximos a cero, no siempre significativos y sin un mismo signo común.
Figura 3.2.b. Valor del índice para la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet en el centro educativo por el alumnado, su intervalo de confianza con un nivel del 95 % y su correlación con el rendimiento en CD, para las comunidades y ciudades autónomas participantes
Pulse para ampliar3.2.1.2. Fuera del entorno escolar
SubirEn 16 de los 31 países que aparecen en el estudio, el valor del índice es mayor en la escala de fuera del entorno escolar que en el centro, lo que quiere decir que el alumnado consideró que había aprendido sobre actividades relacionadas con internet en mayor medida fuera del centro educativo. En conjunto, estos hallazgos sugieren que, aunque muchos sistemas educativos indican que cubren temas relacionados con el uso de internet en sus planes de estudio, aún pueden existir desafíos para implementar completamente este objetivo en el aula. También plantea preguntas sobre qué aprenden exactamente los estudiantes fuera del centro educativo, de quién o de qué fuentes, y las posibles consecuencias de este aprendizaje en comparación con el aprendizaje dirigido por el currículo en el centro educativo.
En la Figura 3.3.a. se observa el valor del índice, entre paréntesis, que declaran los estudiantes sobre la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet fuera del entorno escolar, su intervalo de confianza con un nivel de confianza del 95 % y su correlación lineal con la puntuación media obtenida en el rendimiento en CD para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE. Los países que obtuvieron los mayores índices son Letonia, Portugal, República Eslovaca, Rumanía y Eslovenia con valores entre 52 y 53 puntos en la escala. Por el contrario, Corea y Bélgica (Fl.) presentaron los menores índices, ligeramente por debajo de los 47 puntos. Los países en color ocre no presentan diferencias estadísticamente significativas con el valor del índice en España. El valor del índice en España (49,0), aunque por debajo, está muy próximo al Promedio UE (50,4).
Los coeficientes de correlación muestran una dirección consistente en cuanto a la relación entre esta escala y el rendimiento de los estudiantes en CD, además todos son positivos y estadísticamente significativos. En promedio, en todos los países europeos participantes, el coeficiente de correlación entre esta escala y la CD es 0,16. El aprendizaje que declaran tener los estudiantes sobre el uso de internet fuera del entorno escolar parece estar más positivamente asociado que su aprendizaje declarado sobre el uso de internet en el centro educativo en cuanto al rendimiento en CD.
Figura 3.3.a. Valor del índice para la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet fuera del entorno escolar por el alumnado, el intervalo de confianza al nivel del 95 % y su correlación con el rendimiento en CD, para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE
Pulse para ampliarEn la Figura 3.3.b. se observa el valor del índice, entre paréntesis, que declaran los estudiantes sobre la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet fuera del entorno escolar, su intervalo de confianza al nivel de confianza del 95 % y su correlación lineal con la puntuación media obtenida en el rendimiento en CD para las comunidades y ciudades autónomas participantes. Melilla (50,8) es la única que obtiene un valor del índice superior al Promedio UE (50,4). Por otro lado, Cataluña (48,3) es la única que obtuvo un índice inferior al de España (49,0), siendo la comunidad autónoma en la que el alumnado consideró estar trabajando en menor medida el uso responsable de internet fuera del entorno escolar.
Los coeficientes de correlación muestran también una dirección consistente positiva en cuanto a la relación entre el índice y el rendimiento en CD, que además es significativa en casi todos los casos. La única correlación que no fue estadísticamente significativa le correspondió a Ceuta. En el extremo opuesto, el coeficiente de correlación de Melilla (0,24) es el doble que el de España.
Figura 3.3.b. Valor del índice mostrando la extensión del aprendizaje responsable del uso de internet en el centro educativo por el alumnado, su intervalo de confianza con un nivel del 95 % y su correlación con el rendimiento en CD, para las comunidades y ciudades autónomas participantes
Pulse para ampliarLa relación entre el uso de las TIC por parte de los estudiantes y su bienestar se ha convertido en un tema pertinente que incluso ha aumentado en importancia desde la pandemia de COVID-19 (Kovacs et al,, 2022; Lee et al., 2022 ). La relación es compleja y multifacética. Si bien los dispositivos digitales ofrecen oportunidades para el aprendizaje, la comunicación y el entretenimiento, el uso excesivo o inapropiado puede llevar a una serie de problemas que afectan al bienestar de los estudiantes (Braghieri, Levy y Makarin, 2022; Guedes, Desiderá y Gonçalves, 2018; Jackson, 2012 ). Establecer un enfoque equilibrado en el uso de dispositivos digitales, promover hábitos saludables de tiempo frente a la pantalla y enfatizar la importancia de la actividad física y las interacciones cara a cara son esenciales para salvaguardar el bienestar general de los estudiantes en la era digital (Hou, Xiong, Jiang, Song y Wang, 2019 ).
ICILS destaca la importancia de enseñar a los adolescentes a usar las redes sociales de manera responsable para proteger su bienestar. El ciberacoso es un problema grave que afecta la salud mental de los estudiantes, y educarles para reconocerlo puede crear un entorno en línea más seguro. Además, el uso excesivo de las TIC y el comportamiento sedentario pueden perjudicar la salud física y psicológica de los adolescentes. Promover un equilibrio entre el tiempo frente a la pantalla y la actividad física es esencial para su bienestar general.
En ICILS se les preguntó a los estudiantes en qué medida han aprendido sobre los siguientes temas relacionados con el uso seguro y responsable de las TIC en el centro educativo:
Los estudiantes respondieron a cada afirmación seleccionando una de las cuatro opciones de respuesta (“en gran medida”, “en moderada medida”, “en pequeña medida” y “nada en absoluto”).
Para resumir las respuestas de los estudiantes se utilizaron los resultados de todas las cuestiones menos “Cómo denunciar el ciberacoso”, estableciendo un índice sobre el aprendizaje del uso seguro y responsable de las TIC en el centro educativo con una escala de puntuación media de 50 puntos y una desviación estándar de 10. Esta escala se puede apreciar en las Figuras 3.4.a. y 3.4.b. para los países participantes en ICILS 2023 y las comunidades y ciudades autónomas españolas, respectivamente.
Los mayores valores del índice se dieron en Taiwán (57,6), con mucha diferencia sobre Corea, Grecia, Kazajistán e Italia, con valores próximos a los 53 puntos. Con los valores más bajos se sitúan Portugal (44,5), Hungría (46,1) y Francia (46,3), donde los estudiantes declararon que las afirmaciones sobre el uso seguro de las TIC que componen el índice se han tratado menos que en el resto de países del estudio. España (50,1) no tiene diferencias significativas en el valor del índice con los países en color ocre y se encuentra casi un punto por encima del Promedio UE (49,3) (Figura 3.4.a.).
No se pudo observar un patrón claro en cuanto a las correlaciones del índice con el rendimiento en CD. Todos los coeficientes de correlación son pequeños, tomando su valor más alto, 0,23, en Kazajistán u Omán. Algunos coeficientes son negativos mientras que otros son positivos y no siempre estadísticamente significativos.
Figura 3.4.a. Valor del índice sobre el aprendizaje del uso seguro y responsable de las TIC en el centro educativo por el alumnado, el intervalo de confianza al nivel del 95 % y su correlación con el rendimiento en CD, para los países participantes en ICILS 2023, el Promedio ICILS 2023 y el Promedio UE
Pulse para ampliarEn la Figura 3.4.b. se observa el valor del índice, entre paréntesis, que declaran los estudiantes sobre el aprendizaje del uso seguro y responsable de las TIC en el centro educativo, su intervalo de confianza al 95 % de significatividad y su correlación lineal con la puntuación media obtenida en el rendimiento en CD para las comunidades y ciudades autónomas participantes. Castilla y León (51,3), el Principado de Asturias (50,9), la Comunidad de Madrid (50,6) y Andalucía (50,6) obtuvieron los mayores valores de la escala del índice. Por otro lado, Ceuta (49,1) y Melilla (49,2) son las únicas regiones cuyos índices se encuentran por debajo del Promedio UE (49,3), pero con escasa diferencia.
Las correlaciones del índice con el rendimiento en CD son muy pequeñas, 0,11 o menos, y no siempre significativas.