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Sesión del 30 de noviembre

La segunda sesión del Seminario Web de Convivencia Escolar La educación nos hace ser estuvo dedicada a experiencias de centros de Infantil y Primaria y de Secundaria y Formación Profesional que pueden servir de inspiración a otros centros para crear estructuras que mejoren la convivencia escolar.

Sara Mollá Peña, coordinadora del programa del CEIP Caballero de la Rosa Nueva ventana, nos habló de la comunidad de aprendizaje basado en el modelo dialógico de resolución de conflictos. Partiendo de un sueño como proyecto común, crearon la norma, una norma que pudiera ser relevante para los niños y las niñas. De esta manera, configuraron en comunidad la norma «Sé valiente, actúa y pide ayuda».

A partir de la lectura del libro Club de los valientes de Begoña Ibarrola, crean uno con el mismo nombre para promover que el alumnado (valiente) denuncie las injusticias. Así, han conseguido cambiar el vocabulario, como la palabra «chivato» que se ha sustituido por «valiente» y el «parte» en «boletín de consecuencias». Trabajan el concepto de amistad que se entiende como saber elegir bien los amigos, aplicando la regla «No es no». Promueven la actuación «bystander intervention» con la que, poniéndose delante de los abusadores, impiden que se cometa el abuso.

Los adultos en la comunidad de aprendizaje tienen «las gafas puestas» para detectar los casos de violencia. Para ello, se fomenta el diálogo entre el profesorado, el alumnado y la comunidad educativa. A través del diálogo igualitario los alumnos se atreven a hablar con todo el profesorado, confían en que se les va a hacer caso y hablan cuando alguien no les trata bien. Esto conduce a un mejor rendimiento académico y a la disminución de la violencia física y verbal. En relación al profesorado, es imprescindible que reciban formación basada en la evidencia para mejorar la convivencia.

M.ª Felisa Álvarez Velasco, directora del CEIP San Pedro de los Arcos Nueva ventana de Oviedo, nos contó la historia de su centro y los pasos que han seguido para mantener y ganar alumnado mejorando la convivencia. Se define como un centro público, abierto, tolerante, cercano, acogedor, multicultural y familiar. La bandera que define al centro es la buena convivencia. En la actualidad es «un cole de todos y de todas para todos y para todas».

El viaje transformador del centro buscaba formar y educar en valores e incluir a todos a través de nuevos aprendizajes con recursos tecnológicos y nuevas metodologías. Para ello, comenzó decorando el patio con el lema «Aprende a soñar». Este viaje ha contado con diferentes compañeros de viaje, como la ONG Ayuda en acción, el Ayuntamiento de Oviedo y Google, que facilita múltiples recursos. En esa línea, se incluyen las Aulas Dinámicas y rincones tecnológicos, espacios para innovar, colaborar, donde todos y todas puedan participar.

El profesorado ha recibido formación en aprendizaje cooperativo y en el modelo dialógico de resolución de conflictos, por lo que sido nombrado Centro promotor de la equidad. Una forma de incluir a todas las culturas del centro es celebrar efemérides como el Día de la Lengua Materna o el Día de la Cultura de Origen. Igualmente se organizan grupos para conocer los idiomas de las familias.

La siguiente parada del viaje del centro es Hacer de cada instante una oportunidad: convivir, compartir, crecer, caminar y seguir viajando.

Juan Manuel García Molina y M.ª José Bernabé Cortés del IES Bembézar Nueva ventana de Azuaga (Extremadura) nos presentaron su programa Ayuda entre iguales. Alumnos Acompañantes, que pretende combatir el acoso escolar, facilitar la integración del alumnado nuevo y crear estructuras de resolución pacífica de conflictos.

Para comenzar este programa crearon un equipo de convivencia que actualmente cuenta con 31 alumnos acompañantes de 3.º y 4.º de ESO, 41 mediadores (alumnos, alumnas, padres y madres) y 8 profesores. Para elegir al alumnado participante se reúnen los tutores de 2.º de ESO junto con el departamento de Orientación. Dicho alumnado tiene que tener escucha activa, empatía y asertividad. Se les da una formación de 10 horas y después deciden libremente si participan o no en el programa.

Las funciones de los alumnos acompañantes son variadas: ayudar a sus compañeros; liderar actividades de grupos durante los recreos; dar a conocer el programa a toda la comunidad educativa; hacer mediaciones formales e informales y orientar o ayudar en las tareas educativas. Además, se trabajan otras actividades en tutorías o en actividades de convivencia como habilidades comunicativas o convivencias que preparan los alumnos de 3.º para los alumnos de 1.º en las que se trabaja la cohesión grupal.

En tiempos de COVID, siguiendo la metodología aprendizaje-servicio y usando las TIC, han empezado el programa Te ayudo a través de una página web en la que registran, de manera anónima, peticiones de ayuda o comunican conflictos. Esta página es gestionada por alumnas del centro que han puesto en marcha la plataforma y que han inventado un nuevo programa online Te ayudo en el estudio donde tutorizan y ayudan a organizar el estudio a otros alumnos.

La última experiencia que tuvo lugar en esta segunda sesión fue la del IES Rusadir Nueva ventana de Melilla, en la que el director del centro, Miguel Ángel López Díaz, nos contó las especiales dificultades de un centro que se encuentra en una zona marginal de la ciudad. El Plan de Convivencia del centro parte de los problemas de convivencia desde que se creó. Debido a las características del alumnado y al choque de culturas lo principal es crear estrategias para romper esa barrera de conflictividad existente. Se realizan actividades transversales para trabajar la convivencia pacífica dentro del centro y con la comunidad educativa. Algunos de los programas en los que trabajan en la actualidad son, por ejemplo, el programa MUS-E en el que se trabajan diferentes valores a través del arte.

Asimismo, trabajan con las ONG Movimiento por la paz y Save the children, de la que reciben apoyo escolar para el alumnado fuera del horario lectivo. Todos los programas se aglutinan en un plan anual que se incorpora al Proyecto Educativo sustentado en los pilares de la interculturalidad y en las vivencias propias que sirven para la mejora de los aprendizajes.

La convivencia en el centro ha mejorado de manera significativa y ha repercutido en el rendimiento académico del alumnado. Prueba de ello, es que ha recibido varios premios. Tanto el alumnado como el claustro es muy dinámico y realizan valiosas contribuciones.

Igualmente, han llevado a cabo actuaciones de mejora de los espacios físicos del centro, en especial, los pasillos y el patio, para contribuir no solo a una percepción visual más armónica, sino también para mejorar el medio ambiente. Es importante señalar que las aulas de informática, audiovisuales y la biblioteca escolar están abiertas durante los recreos y por las tardes para que los alumnos puedan realizar sus tareas. Una de las celebraciones más importantes son las Jornadas de Convivencia. Se realiza a finales de enero coincidiendo con el Día de la Paz y la No Violencia Escolar.

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