En una Europa que se cuestiona a sí misma y en la que aparecen voces negando la solidaridad con las personas refugiadas, donde las cifras de muertes por violencia de género no bajan al ritmo esperado y donde los objetivos medioambientales están lejos de conseguirse, los centros europeos de esta asociación consideran necesario reforzar la eficiencia en la enseñanza de lenguas extranjeras, promoviendo el empleo de metodologías diferentes a las tradicionales del currículo para generar un aprendizaje más abierto y atractivo, utilizando recursos fuera del centro en la enseñanza de valores como la igualdad de género, la solidaridad y la sostenibilidad.
Para dar soluciones globales a estos problemas, es necesario un esfuerzo a nivel europeo en el que alumnado de edad similar, pero de diferentes entornos lingüísticos y socioculturales de Europa sea capaz de colaborar y realizar actividades conjuntas. Trabajar juntos en un proyecto común hace que la idea de Europa no sea una abstracción y promueve la conciencia de la interconexión existente entre los diversos países de la Unión Europea. El alumnado compartirá la vida y la forma de pensar de otros chicos y chicas europeos, así como sus problemas y prioridades, y el profesorado apoyará esta inmersión y aprenderá de ella también.
Durante los intercambios, tanto de corta como de larga duración, el alumnado convivirá en familias, por lo que conocerá en una situación real las costumbres y tradiciones mediante el empleo de una lengua extranjera. Los/as participantes en este proyecto experimentarán lo que les diferencia, pero también lo mucho que tienen en común. Este objetivo es muy importante para su desarrollo personal y no podría ser alcanzado sin una cooperación internacional. Además, les ofrecerá la oportunidad de empatizar entre ellos, al tiempo que se reduce la desigualdad, intolerancia, los prejuicios y la creación de estereotipos.
Todo ello sería imposible de conseguir trabajando aisladamente. El aprendizaje de idiomas en sí mismo constituye una gran herramienta a la hora de progresar en la vida académica y profesional. Los idiomas no sólo aumentan la posibilidad de conseguir un mejor trabajo, sino que enriquecen la vida social y cultural en un mundo globalizado. Abre puertas y aumenta la autoconfianza. Una juventud más competente lingüísticamente es más proclive a desarrollar la conciencia de ciudadanía europea mediante la comunicación y el intercambio de valores sociales de solidaridad, igualdad y desarrollo sostenible con compañeros/as de otros países.
Es necesario que la juventud comprenda que vive en un mundo de interacción global y que tiene la posibilidad, y casi la obligación, de explorar otras culturas, sus hábitos y estilos de vida por medio de la apertura sociocultural que permite los idiomas. Los objetivos específicos de este proyecto van dirigidos a atender las necesidades sentidas por todos los centros socios y contribuir conjuntamente desde el ámbito educativo a la consecución de los objetivos Europa 2020 mediante eventos conjuntos de formación de corta duración para el personal, intercambios de corta duración de grupos de alumnos y movilidades de larga duración para el alumnado por motivos de estudios.
PROYECTO ERASMUS + 2019-1-ES01-KA229-063957